Junio 5, 2016 (Crème caramel)

El miércoles fui a Shalom. Al llegar saludé a Elías y a Hugo, ambos son muy amables. En ese momento Elías me presentó a Dania, que está en una red de virología en el IBT. Ella también es bastante amable.

Marco se acercó a despedirse y Elías preguntó si ya lo conocía, le dije que ya lo había visto, y Marco dijo «yo también lo he visto, se sienta por el árbol». Era cierto.

Saludé a Viri y a Luis. Estaba también Daniela, la esposa de Luis. Al comenzar la reunión llegó Noé, un ingeniero que, para variar, también es muy amable. Y luego llegó Denisse con esa enorme sonrisa y esos pequeños ojos. Ese día descubrí que al parecer no es una mujer arisca.

Me sorprendió ver lo bien que se llevan, su unidad y convivencia. No pude haber elegido mejor lugar para invertir mi tiempo en Cuernavaca. Espero un día poder llegar a tener una buena amistad con ellos porque estoy seguro que valdrá la pena, que aprenderé muchas cosas.

Moverán las reuniones a casa de Dania, y está bien porque es más cerca.

Algunos días me imagino que creo un vínculo con Denisse y que cuando termino la tesis y mi estancia allá, acuerdo ir a visitarla y que incluso me invita a comer a casa de sus padres. Es una locura.

Vi a Gloria de nuevo y ahora no me pareció tan bella. A pesar de tener una bonita sonrisa, hay algo que me impide idealizarla. Será su estatura o su informalidad al vestir, o será que necesito verla de nuevo como el sábado que comimos en casa de Vero.

Alex subió fotos de la boda de F. y G., él iba de traje negro, S. de vestido negro con blanco, y Jess con vestido rosa. Traía el pelo alaciado y lucía tan bien que estuve a punto de decírselo pero me contuve pues no supe cómo podría terminar, aún soy débil.

Por último, Maribel no ha aparecido y está bien porque cuando lo haga seguro me sorprenderá de nuevo, como le dije a Mandinga, tiene esa buena costumbre de compartir cosas extraordinarias. Crème caramel, por ejemplo.