Septiembre 18, 2016 (Te regalo algunos de mis años)

Maribel ha aparecido de nuevo y lo ha hecho con una gran noticia. Nada más.


Mi atención está ahora centrada en Itzel hasta que me muestre su imposibilidad o hasta que Nadia exista otra vez. No quisiera aferrarme a algo inaccesible, a la improbabilidad de tal elección.

No he encontrado empleo y eso me desespera un poco, quisiera poder adquirir cosas y apoyar con otras más en casa y en la congregación. Empezaré a asistir a las reuniones sabatinas antes de que se me pasen los años.


«Este domingo he vuelto a verte y mi corazón se ha inquietado. Lucías sencillamente hermosa por el poder de tu sonrisa y tus cejas, por tus mejillas y tu cabello, por mi mente que se ha acostumbrado a ver lo bello en tus guisas más nimias.

Te regalo algunos de mis años con mi poca experienca en ellos con tal de paliar el atavismo, esa diferencia que el tiempo no ha podido vencer y que me impide mirarte y crearte como quisiera. Pero no es posible.

De cualquier forma, sigue siendo tú, sonriendo como tú, andando como tú, no mirándome como tú.»

Comentarios

Entradas populares